Una actividad con más de un milenio de historia, el proceso continúa como en los períodos ancestrales. Un ejemplo a apoyar, para mantener vivo este recuerdo.

Este espacio es muy recomendable para una salida familiar, se aprende fácilmente el proceso de la sal además de otras actividades inherentes a este producto

Hay registros de las Salinas de Aveiro desde el año 959. La sal portuguesa se consideraba de excelente calidad y era como el oro blanco. Incluso había 270 Salinas en funcionamiento. Hoy en día la actividad se desarrolla por sólo 9. La sal fue muy importante, especialmente en la era de los descubrimientos para salar el pescado y a lo largo de los años para preservar el pescado y la carne. Con la llegada del refrigerador esta necesidad dejó de existir y la actividad disminuyó.