¿Hay algo mejor que llegar a casa y saber que tu mascota está ahí para recibirte con auténtica alegría? Perro, gato, pájaro, conejo o incluso animales grandes como el caballo: además de fieles compañeros, también son nuestros terapeutas. A continuación, hacemos una lista de 5 beneficios para la salud física y mental que te proporciona tener mascota:

Reducen el estrés, mejoran el estado de ánimo
Bastan unos minutos con nuestro amigo peludo (o emplumado) para que nos sintamos más tranquilos. Varios estudios han demostrado que la interacción con animales de compañía reduce el estrés, la presión arterial y el riesgo de enfermedades cardíacas. Fomentan una sensación de bienestar y ayudan a aliviar la soledad. El simple acto de acariciarlos libera endorfinas, sustancias químicas que nos hacen sentir relajados y felices.

Fomentan la actividad física
Pasear, jugar y cuidar a una mascota son actividades que nos mantienen más activos. Esta interacción no solo beneficia nuestra salud sino que también fortalece el vínculo con nuestro pequeño amigo. Si tienes un perro, sácalo al menos 30 minutos al día, tiempo suficiente para alcanzar el nivel diario de actividad física recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Aprovecha para socializar: nos hacen conocer y hablar con la gente durante los paseos diarios o las visitas al parque para perros.

Ayudan al desarrollo social
Cuidar a una mascota despierta emociones, aumenta el sentido de responsabilidad y dedicación, consecuencia del cuidado diario con la alimentación, la salud y la higiene. Esto ayuda a desarrollar habilidades como la paciencia, la empatía, la organización y la disciplina. Tener una mascota puede ser una experiencia enriquecedora y educativa, especialmente para los niños.

Fortalecen el sistema inmunológico de los niños
Durante años, se pensó que la exposición a las mascotas podría desencadenar alergias en los niños. Hoy se sabe que es todo lo contrario: cuanto más temprano conviven los niños con animales, menor es la posibilidad de desarrollar alergias o enfermedades respiratorias, como el asma. Esto sucede porque el sistema inmunológico se fortalece. Pero tenga en cuenta que esto no se aplica a niños o adultos que ya tienen alergias.

Son compañeros terapéuticos
Las mascotas pueden desempeñar un papel terapéutico importante: ayudan a reducir los síntomas de depresión, ansiedad y estrés postraumático. Hay terapia asistida con animales y es muy utilizada en casos de autismo, parálisis cerebral o trastornos intelectuales, físicos o emocionales.

Cuidar de una mascota es una gran responsabilidad, pero cuando consideras todos los beneficios anteriores, todo ese trabajo vale la pena. Si todavía no tienes una mascota y estás considerando tener una, no tomes una decisión por impulso. Tener una mascota implica costos económicos, tiempo disponible para cuidarla, contar con un espacio adecuado y compatibilidad con nuestro estilo de vida. Una mascota es o será uno de los mejores compañeros de tu vida, fiel hasta el último instante.